Ciertamente cuando vamos a pintar una habitación las opciones pueden marearnos y es que crear un espacio que refleje nuestra personalidad, satisfaga nuestras necesidades y que también nos ayude a diseñar esa área única, puede ser complicado, pero la combinación de colores perfecta dependerá de las sensaciones que quieras transmitir en tu dormitorio. No es lo mismo una alcoba en la que sólo se duerme o a que otra en la que también se trabaja.
Por eso si lo que deseas es un lugar tranquilo emplea azules y blancos siempre aportan relax además de que son muy combinables. Pero si tienes que ocupar esta zona como lugar de trabajo o estudio emplea gamas de amarillos o naranjas, aportan dinamismo y creatividad, pero ¡ojo! deberás mezclarlos con otros tonos, si tienes pisos de madera o si colocas alguna alfombra blanca o color arena el efecto será increíble. Dentro de la cromática relajante se encuentran también los rosas o malvas, ideales para habitaciones de niñas o para crear un punto femenino muy elegante.