Un buen asesoramiento profesional es básico, porque te ayudará a elegir el presupuesto más ventajoso para ti y con todas las garantías. Nunca aceptes presupuestos que engloben trabajos, por ejemplo, toda la electricidad o fontanería porque si después quieres incluir un enchufe o un grifo para la terraza, el costo puede elevarse demasiado, en cambio, sabiendo cuánto cuesta instalar cada enchufe o sacar un punto de luz, puedes controlar mejor esos pequeños ajustes de diseño.
Ten presente que los gastos de desmontes y retirada de escombros también tienen costo y en algunas ocasiones esos extra corren por tu cuenta, por eso es muy importante que todo quede especificado y por escrito. Nuestro consejo es que si quedas muy justito en los gastos de remodelación, inclínate por la obra seca, siempre es una buena solución, además de acortar los tiempos también reduce mucho la suciedad y el polvo que inevitablemente provoca una obra convencional.