Siempre teniendo en mente que la energía nos ayude a fluir de la mejor manera, el feng shui hace hincapié en que la orientación de las ventanas es clave, por ser donde entra energía y como éstas nos conectan con el exterior, debe de haber un equilibrio entre ambos mundo. ¿El tamaño? tendrá que ser proporcional a los ambientes, pero una ventana pequeña puede producir estrechez entre los habitantes.
Por lo que lo ideal es que éstas abran hacia afuera, como símbolo de la buena suerte, por lo que debemos procurar que nuestras ventanas tengan una apertura sencilla y al dejar ver el alma de la casa, deberán de permanecer siempre limpias, pero sin alterar nuestra intimidad, por lo que también es recomendable el uso de cortinas o persianas, recuerda que el color, la tela y los materiales también nos ayudan a armonizar nuestro hogar.