Y para el dormitorio, que es el lugar en donde reponemos energías esta filosofía oriental recomienda eliminar cualquier aparato electrónico o al menos dejarlo lejos de nosotros. Pintar la habitación con colores claros, algunos ejemplos son: el azul para la protección y tener sueños armoniosos, el rosa para el amor y la calma o los tonos ocres que ayudan a conseguir un ambiente más relajado, además indica que el mobiliario sea el mínimo.
Si tienes techos altos esta perfecto, pero si en tu dormitorio hay elementos como las vigas pueden cortar lo que llaman chi o energía y producir opresión y malestar entre sus habitantes, deberás prescindir de ellas o al menos cubrirlas, tampoco coloques plantas en esta estancia, ya que producen un exceso de energía y es el momento de descansar.