El principal elemento para tu alberca es la piedra, por supuesto, pero también terracota, madera, fibras naturales, gravillas, hierro forjado o incluso materiales naturales del mismo entorno, ya que este tipo de piscinas tiene por vocación respetar y estar en concordancia con el medio ambiente en el que se desenvuelve. Si quieres que en conjunto luzcan armoniosos, fíjate en los materiales con los que está construida tu casa y aplícalos en el porche y tu piscina. Si tu casa se ha revestido con piedra, haz lo mismo con la alberca o en los terrarios que pongas en el jardín, ahora que si es de cemento, levanta una piscina de obra imitando una alberca o estanque antiguo y píntalo todo con cal, pero si el estilo de la vivienda es más con vigas y tarimas de madera, reviste el exterior de la piscina con el mismo material.