El poder de los materiales naturales es impresionante y es que cuando empleas piedra natural en el recubrimiento de tus paredes, te permite aprovechar las características inherentes a ellas, como retener el calor y el frío. Además, estéticamente el terminado que se logra al emplearlas es único. Entre los materiales más utilizados por su belleza, estética e incluso colores, destacan los granitos, aunque también puedes optar por pizarras, areniscas o incluso piedras volcánicas. Ten en cuenta que no son materiales que aíslan por sí mismos, es decir las piedras naturales si se enfrían tardan en calentarse y si se calientan tardan en enfriarse. Es por ello que pueden ayudarnos a mantener el frío de nuestro aire acondicionado o el calor de nuestros calefactores.