Antes que nada, debes de tener presente que los perros y gatos no tienen los mismos hábitos, por ejemplo, a los perros les gusta estar cerca de la familia todo el tiempo y los gatos son más independientes. Para descansar los perros les ponen pocos peros a los cojines, almohadones o incluso tela, pero los gatos prefieren los lugares altos por lo que te recomendamos que veas donde le gusta estar a tu minino y le coloques ahí su cama y aunque eligen sitios extraños para dormir frecuentemente prefieren las zonas cálidas y donde reciban los rayos del sol, por lo que hay que ser práctico, si le colocas ahí su lugar de descanso posiblemente lo acepte mejor, aunque siempre existe la posibilidad que cambie de idea, por más acogedor que hayas hecho su rincón