Como te mencionábamos anteriormente, lo ideal sería que pudieras separa físicamente tu espacio laboral, del ámbito familiar con una habitación extra, pero de no ser posible, procura que tu lugar de trabajo cuente con el espacio suficiente para que estés cómodo, que la mesa sea lo bastante amplía para colocar tu computadora, hojas, lápices, en fin, lo que ocupes normalmente para trabajar. Ubícate cerca de ventanas para que entre suficiente luz natural pero cuida que no sea de forma directa, para que no te moleste el rostro o te genera incómodos reflejos.
Si tienes que emplear luces artificiales, que de preferencia utilice leds, ya que aportan una iluminación uniforme, generan poco consumo de energía y no proporcionan calor al lugar, ahora que si tienes que emplear una lámpara lo más indicado es ubicarla de tu lado izquierdo y dirígela al teclado, para evitar que rebote la luz sobre la pantalla o tus ojos. Y finalmente aprópiate de la silla más cómoda de tu casa, pero que te permita mantener una buena postura, ya que pasarás varias horas en ella.